Desde la tarde del lunes, las aduanas de Reynosa, Tijuana y Ciudad Juárez presentan congestionamientos debido a la actualización del sistema de validación de exportaciones. Se prevé que esta situación continúe hasta el 14 de febrero.
En Tijuana, el tráfico afecta gravemente la zona del puerto fronterizo de Mesa de Otay, donde decenas de tráileres bloquean dos de los tres carriles en ambos sentidos. La fila de vehículos alcanza los 8 kilómetros, generando demoras de hasta dos horas. Además, el tránsito lento impacta a los usuarios del aeropuerto de la ciudad, sin apoyo visible de agentes de tránsito.
En Reynosa, el panorama es similar. La actualización del software ha causado filas kilométricas de camiones de carga, llegando hasta el municipio de Río Bravo. Edgar Zamorano Santillán, presidente de la Canacar en la región, explicó que, aunque se notificó a los gobiernos locales sobre el cambio en el sistema, no se implementaron medidas preventivas. Los conductores enfrentan condiciones difíciles, sin acceso adecuado a agua, alimentos o servicios básicos.
En Ciudad Juárez, la situación también es crítica. Manuel Sotelo, vicepresidente de la Canacar, informó que el sábado pasado inició la actualización del sistema del SAT, lo que ha provocado la acumulación de más de mil tráileres sin poder cruzar hacia Estados Unidos. El proceso de validación, que antes se realizaba con códigos QR, ahora se hace manualmente, lo que ha ralentizado aún más el tráfico.
Pese a las afectaciones, la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) asegura que las operaciones de comercio exterior continúan, gracias a la coordinación con cámaras empresariales y la aplicación de protocolos de contingencia. Sin embargo, los retrasos están generando pérdidas económicas significativas para el sector del autotransporte de carga y dificultades para miles de conductores y usuarios de la frontera norte.